12 ene 2014

El correista del 2013



Miguel Molina Díaz

Leidis y yentelmanes, bienvenidos todos y todas, por segundo año consecutivo, a la entrega del premio el ‘Correista del Año’. Se trata de la máxima y suprema mención que se hace a quién durante los 12 meses del 2013 haya sido el más leal, disciplinado, pasional y eficiente miembro o ‘miembra’ de la Revolución Ciudadana.

Somos millones y ‘millonas’ las personas que vemos y sentimos los nuevos vientos y ‘vientas’ que sopla el gobierno. Por eso es tan importante celebrar al revolucionario o revolucionaria más grande de este periodo, para que asuma la alerta viva y ferviente que constituye la espada de Bolívar por América Latina.

La tarea no es fácil. ¡Y es que son tantos y tantas los compañeritos y las compañeritas que han luchado para que la patria avance y sea altiva y soberana! Pero, al igual que la paliza –¡que tremenda paliza!– de Constanza Báez en Miss Universo, es necesario que de esta noche salga un solo nombre o ‘nombra’ para que se lleve el premio.

Con el dolor del alma –¡que gran dolor!– hay que descalificar a uno de los favoritos. Se trata del fiscal Galo Chiriboga, ya que estuvo un poco lentito en todo lo que al caso del bachiller Pedro Delgado se refiere y, además, a las largas conversaciones de chat que éste último dice tener con la cabeza del Ministerio Público. ¡Habrá que esperar a ver de el contenido de esos diálogos de Whatsapp!

Así mismo, quedan descalificadas las asambleístas Paola Pabón, Gina Godoy y Soledad Buendía, por indisciplinadas. No entendieron que la revolución será de católicos practicantes o no será. ¡Si hasta Guillermo Lasso lo entendió! ¡Mucho cuidadito a los y las abortistas, con Mujica a la cabeza, porque no se van a tolerar ese tipo de caretucadas!

Las menciones especiales van para personajes y ‘personajas’ que, si bien no llegaron a finalistas demostraron un compromiso indeleble con los nuevos vientos que refrescan el aire de la patria. Va mención para Antonio Ricaurte, porque su infinito amor al correismo lo llevó a conciliar (con Correa) las dos grandes tendencias que corren por la alcaldía de Quito. ¡Tan bien que hubiera quedado su foto entre los candidatos de la 35, como él mismo quería! Va mención para Mauricio Rodas, candidato de PROposición que de ganar trabajará encantado con EL LÍDER. Va mención para el superintendente Ochoa, que de periodista revolucionario ascendió muy alto y ahora es el jefe de toda la comunicación. ¡Y va mención para los jóvenes y ‘jóvenas’ de Diablo Huma, que aunque ya no se los ve ni se los oye ni se los siente, seguro siguen siendo correistas!

¡Si fuera loable se otorgaría más menciones! A todos los que han callado sobre la explotación del Yasuní. A los que han justificado las sabatinadas/linchamientosmediaticos. A los jueces que han sentenciado a los 10 de Luluncoto, a los 12 del Central Técnico y a unos cuantos dizque “terroristas” que nunca interrumpieron la transmisión del canal público el 30S. A los seudoartistas que con su silencio o sus elogios son cómplices del autoritarismo. ¡Menciones de honor para todos ellos!

¡Vamos con los finalistas! El tercer lugar va para esa mujer hermosa, cautivadora y joven que es Viviana Bonilla. Con su belleza se propone ganar la mayor de las batallas contra la partidocracia. Ella es a Rafael lo que Marco Antonio fue a Julio César. Lo que Rumiñahui a Atahualpa. Lo que Elías Jaua a Maduro. ¡Aplausos para esta enorme latinoamericana!

El segundo lugar va para doña Gabriela Rivadeneira.  El rostro joven y femenino de la Revolución Ciudadana. Mujer valiente, sin pelos en la lengua, aguerrida comandanta a la hora de defender su cuenta de Twitter. Lectora inigualable del Telepromter. La única que ha mandado a comer “mierrrrdaaaa mieeerrrdaaaa” a la oligarquía vulgar, ‘corructa’, y vendida al imperio, que ya debe entender que se viró la tortilla.

Y, sin más largas, el primer lugar va para Mauro Andino, el más grande, enorme, gigante correista que el 2013 ha brindado a la república, al mundo y al universo. ¡El ponente de las leyes clave! ¡El que le pone el pecho a las balas! ¡El sacrificado! ¡El generoso! ¡El único! Mauro Andino, autor de cada una de las ediciones corregidas y aumentadas y recargadas de la Ley de Comunicación y del COIP. El Justin Biber de la bancada oficialista. Hombre sensible, capaz de dar abrazos desde su corazón ferviente por la patria. Hoy ingresa en los anales de la historia del correismo. Mañana su nombre será leyenda.


* Publicado originalmente en La República.


1 comentario:

Clístenes dijo...

¡Qué agudo discernimiento el suyo, señor Molina! ¡Qué difícil debe haber sido la elección! No hubiera querido estar en su pellejo habiendo tantos (as) candidatas que se disputan unos a otros el privilegio de verse, babeantes, junto al líder. Esforzados en mostrarse, cada cual, más serviles y obsecuentes.
Espero su columna no sea leída por Patiño y Barrera que han de sentirse frustrados por no haber sido siquiera mencionados. O, en su defecto, que esperan recibir la presea el año entrante. ¡Calma, verdositos, para todos hay! ¡Trescientos años de correismo esperan al pueblo que lo quiera soportar!